Insurmountable

Insurmountable es un roguelike de aventuras con muerte permanente en el que el jugador tendrá que superar montañas enormes. Como el entorno está generado de forma procedimental, las rutas de escalada siempre serán distintas.

Asegúrate de mantener con vida a tu escalador procurando que sus constantes vitales no caigan en niveles críticos. Esta tarea se complicará más con el sistema de clima dinámico, los cambios entre día y noche y multitud de acontecimientos aleatorios que nunca podrás predecir cómo van a terminar. Toda y cada una de tus decisiones importan, porque cualquiera de ellas podría ser la última.

Elige a uno de los 3 personajes que hay, cada uno de ellos con sus propias habilidades e historias; y empieza a escalar tu primera montaña.

Busca en cajones, cuevas y antiguas ruinas para recuperar equipo de otros aventureros. Lo necesitarás, porque, ya desde la primera montaña, tendrás que dar el cien por cien. Pero no te preocupes: conforme pase el tiempo, te irás fortaleciendo. Aprovecha un sofisticado sistema de habilidades para decidir con qué fortalezas debería contar tu escalador.

En el transcurso de cada una de las tres historias, te cruzarás con animales peligrosos, superarás abismos letales y te toparás con personajes siniestros, pero relevantes, que no siempre son humanos. También en este caso, todas tus decisiones influirán en los acontecimientos sucesivos.

Tres montañas por conquistar, y cada una de ellas más alta y letal que la anterior.

Divide tus fuerzas y equipo correctamente, porque no tendrás una segunda oportunidad y no podrás prever la ruta. En Insurmountable, tendrás que lidiar con peligros desconocidos, reaccionar de forma espontánea ante acontecimientos impredecibles y darte cuenta de que, como pasa en la vida, no siempre puedes saber qué consecuencias tendrán tus decisiones, pero tienes que apostar por ellas para, al final, obtener resultados inesperados.

Enfréntate a desafíos y peligros siempre cambiantes, lidia con tormentas de nieve y planta cara a los elementos sin perder de vista la cumbre para superar lo insuperable.